Es de conocimiento común que, durante las últimas décadas, el inglés se ha convertido en el idioma predominante en los negocios en la economía global.
Además, existe un área especializada de inglés relacionada con el lenguaje y las habilidades comunicativas que utilizan las personas para hacer negocios y realizar sus tareas en el trabajo. Estamos hablando de una rama del inglés para fines específicos que se conoce como inglés comercial o inglés de negocios.
Las áreas temáticas más populares de inglés de negocios incluyen comercio, contabilidad, derecho, farmacia, finanzas, informática, ingeniería, logística, marketing, producción, recursos humanos, seguros, y turismo. Sin embargo, el término inglés de negocios también abarca el inglés que se usa en muchos entornos de oficina en general. Implica la capacidad de expresar ideas con claridad utilizando vocabulario relacionado con el trabajo, frases comerciales y ciertas estructuras gramaticales. Por esta razón, el proceso de aprendizaje se centra más en el desarrollo de competencias comunicativas que en el conocimiento del idioma como objetivo principal.
Hoy en día, muchas personas activas profesionalmente consideran que las habilidades en inglés comercial son absolutamente esenciales para tener éxito en su trabajo y llevar su carrera a un nivel superior. Por otro lado, una gran cantidad de estudiantes que aspiran a tener un buen comienzo en su campo encuentran crucial dominar el idioma de los negocios y tienden a enfocarse en el área del inglés comercial relacionada con la carrera universitaria que han elegido. Aquí puedes leer sobre las razones por las que el inglés de negocios es importante para el trabajo.
Por lo general, un curso de inglés de negocios cubre el contenido del idioma asociado con el conocimiento y las competencias que los estudiantes necesitan para trabajar de manera efectiva en un entorno internacional. En otras palabras, pone énfasis en perfeccionar las habilidades que les permitirán escribir con confianza correspondencia comercial, hacer presentaciones, participar en reuniones, negociar, manejar llamadas telefónicas, viajar por negocios, asistir a conferencias y recibir visitantes, solo por nombrar algunos ejemplos. Además, las actividades del curso deben incorporar vocabulario y frases específicas relacionadas con un sector determinado, p. ej. vocabulario especializado utilizado en el comercio. Entonces el punto focal es el entorno profesional de los participantes y el objetivo principal es ayudarlos a tener más confianza y ser más profesionales en el uso del inglés en su entorno de trabajo.
Para comparar, vale la pena señalar que en el caso de los estudiantes de inglés general se espera que ellos se centren en mejorar las cuatro destrezas: el discurso, la compresión auditiva, la lectura y la redacción, en un contexto general en lugar de enfatizar cualquier área o tema en particular. Dicho esto, el programa del curso de inglés de negocios debe consistir en tareas y actividades que permitan a los alumnos desarrollar las cuatro habilidades mencionadas, pero en el contexto de su trabajo.
A menudo, los profesores de inglés como lengua extranjera consideran que la enseñanza del inglés de negocios es una tarea muy difícil y compleja. Esto se debe con frecuencia a la percepción de que se espera que tengan un amplio conocimiento de los diferentes aspectos del negocio. En realidad, aunque cualquier experiencia y conocimientos relacionados con el mundo empresarial son útiles, no es imprescindible. La enseñanza del inglés comercial implica mostrar a los alumnos cómo usar sus habilidades en inglés en un entorno comercial y ayudarlos a desarrollar sus competencias comunicativas para que puedan realizar sus tareas de manera profesional en un entorno de habla inglesa.
En pocas palabras, se trata de comprender las necesidades, los objetivos y las expectativas de los alumnos, así como el contexto en el que se encuentran, y luego adaptar un curso determinado en consecuencia.
Construir tu reputación
En primer lugar, es importante recordar que el dar buena impresión realmente importa, especialmente cuando se trabaja con adultos que, en la mayoría de los casos, ocupan puestos de alto nivel dentro de una organización. Enseñar de manera profesional significa no solo ser puntual, profesional y competente, sino también vestirse adecuadamente. Estos son los elementos cruciales que, si se tienen en cuenta, definitivamente dirigen a la construcción de una buena reputación para uno mismo y a ganarse el respeto de los alumnos.
Entrevistar a estudiantes
También es necesario tener en consideración que ni un alumno ni un grupo de alumnos es el mismo. Esto quiere decir que si, por un instante, un profesor va a dar clases a los alumnos que trabajan en el campo del marketing y tiene un curso listo que se utilizó anteriormente con un grupo diferente que trabaja en la misma industria, tal curso aún podría requerir ser modificado para satisfacer las necesidades específicas del nuevo grupo. Por esta razón, la primera sesión debe estar dedicada a hablar con los estudiantes para determinar cuáles son sus expectativas realistas y qué sería más útil para ellos aprender, p. ej. redactar correos electrónicos más profesionales, hacer mejores presentaciones, describir gráficos con más detalle, etc. Los profesores también pueden pedir a los alumnos que rellenen cuestionarios para analizar sus necesidades con mayor precisión.
Elección correcta de materiales
Más aun, es fundamental seleccionar materiales que ayuden a los estudiantes a alcanzar sus objetivos. Idealmente, deberían ser lo más auténticos y prácticos posibles, p. ej. los profesores pueden utilizar algunos correos electrónicos antiguos previamente escritos por los alumnos en sus lugares de trabajo para corregir errores y sugerir mejoras. Esto podría ayudarlos a escribir mejores correos electrónicos en el futuro.
Por otro lado, el punto principal es la comunicación, por lo que los alumnos tienen que pasar suficiente tiempo practicando el discurso y es crucial utilizar una amplia variedad de actividades de conversación, como role-plays, mini-debates, presentaciones, etc., tanto en parejas como en grupos. Estas interacciones deben parecerse mucho a las situaciones laborales de la vida real de los alumnos para que puedan mejorar su rendimiento la próxima vez. Los profesores pueden también incluir documentos auténticos que los alumnos utilizan en el trabajo o ayudarles a preparar una presentación que necesitan para una reunión. Esto puede resultar extremadamente útil y los alumnos apreciarán aún más el curso.
Mantener a los estudiantes motivados
Mantener a los alumnos muy concentrados en sus objetivos es otro desafío al que se enfrentan muchos profesores de inglés comercial. Aunque puede ser complicado, todo se reduce a asegurarse de que cada sesión sea lo suficientemente interesante mediante el uso de una diversidad de materiales y actividades relevantes en las que se espera que los estudiantes interactúen entre sí y compartan experiencias. Esto los convertirá gradualmente en mejores comunicadores y cuando se den cuenta de que están progresando, automáticamente se motivarán más.
Además de eso, debe haber alguna novedad en cada lección, como una tarea que los alumnos no hayan hecho antes, una nueva estructura, una frase útil para practicar o un método diferente aplicado por un profesor.
Finalmente, es muy importante establecer una buena relación con los alumnos mostrando entusiasmo y brindando algo de diversión al aula. Las personas tienden a conectarse más fácilmente con aquellos que demuestran una verdadera pasión por lo que hacen, ya que les inspira confianza y hace aflorar emociones positivas.
Enseñar inglés de negocios puede ser muy gratificante. Todo lo que se necesita es un enfoque profesional, comprender verdaderamente las necesidades de los alumnos y preparar clases que los ayudarán a lograr sus objetivos de una manera agradable.
Joanna Borzym | 20 agosto, 2021